El caso contra Álvaro Uribe Vélez ha sido uno de los más mediáticos y complejos en la historia judicial reciente de Colombia. Acusado de manipulación de testigos y fraude procesal, el expresidente ha utilizado todas las herramientas legales a su disposición para defenderse, como la reciente apelación que ha resultado en la suspensión del procedimiento judicial.
Este recurso se fundamenta en la diferencia entre dolo eventual y dolo directo, un tema técnico pero crucial en el derecho penal colombiano.
El Tribunal Superior de Bogotá admitió el recurso de apelación interpuesto por la defensa de Uribe, suspendiendo así el procedimiento judicial hasta que se resuelva este recurso. Esta decisión, además de paralizar el proceso, incrementa las posibilidades de que los delitos imputados prescriban en octubre de 2025.